Pensamiento femenino negro cubano


Por Daysi Rubiera Castillo

Quiero comenzar mi exposición con un fragmento del artículo “La inteligencia negra” de Arabella Oña, escrito en 1939:  ¨(…) es hora ya que la igualdad se establezca para todos, que la justicia no se determine por el color de la piel, sino por las cualidades de las personas. A ello debemos contribuir todos, negros y blancos, completamente unidos, igual que en los campos de la Revolución para conquistar la independencia de Cuba¨1.

Esa manera de pensar  que ponía de manifiesto una correcta actitud, antirracista, haciendo hincapié en borrar las consecuencias de varios siglos de régimen esclavista, es un ejemplo de cómo se comportaba el  pensamiento negro femenino en relación con  la  comprensión cabal de la problemática racial cubana y de la necesidad de adecuar la acción a los factores reales del momento

Pensamiento prácticamente desconocido, debido al silencio que, salvo alguna excepción, existe en los textos sobre los diferentes acontecimientos que aparecen en la historiografía cubana, incluyendo los  estudios realizados, en los últimos años, sobre la problemática racial.

Romper ese silencio, dejar escuchar esas voces pertenecientes a un grupo social necesitado de mayor espacio de visibilidad, es validar ese pensamiento, silenciado fundamentalmente, por consideraciones de raza, género y el mantenimiento en la conciencia cultural y colectiva de una imagen  estereotipada de las mujeres negras.

Es validar su presencia en los acontecimientos político-sociales que se desarrollaron  desde finales del siglo XIX,  en los  primeros y convulsos años de la nueva república, y a lo largo de toda la vida republicana e incluso después del triunfo de la Revolución en 1959. Pensamiento que se visualizó a través de escritos,  muy comprometidos, acordes con diferentes momentos coyunturales de la política en aquellos años.

Si recorremos las  páginas de algunas revistas y periódicos observamos que aquel discurso estaba escrito con claridad y energía,   se enriquecía, maduraba, y evolucionaba en los diferentes momentos de la historia, imperando en ellos una reiterada repulsa ante la posición racista  existente en la sociedad.

Pensamiento que se comienza a visibilizar a finales del siglo XIX en  la revista Minerva. Primera publicación femenina dedicada a negras y mestizas. En su enfoque se percibe una toma de conciencia en muchas de sus redactoras, al hacer hincapié en borrar las consecuencias de varios siglos de régimen esclavista, y a la vez, esclarecer asuntos, concretar ideas, fijar puntos de vistas y definir aptitudes cada vez que salieron a luz.

Entre las temáticas que abordaban aquellos escritos se encontraba de manera prioritaria, la necesidad de la superación. Como constante, la inserción de las personas negras dentro la sociedad cubana. En el marco de las preocupaciones sociales,  la equidad entre mujeres y varones a partir del reconocimiento de que la desigualdad, no era natural, que había sido construida.

También fueron abordadas temáticas como, el reconocimiento de los valores éticos de la raza negra; las relaciones entre  personas blancas y no blancas; el derecho al sufragio; escritos polémicos sobre raza e identidad. Muchas otros temas fueron tratadas por las mujeres negras entre ellos, las reflexiones sobre sus experiencias en la sociedad cubana,  la falta de democracia en la República.

Pensamiento que va alcanzando su plena madurez hacía  la década de los 50 del siglo XX. Un ejemplo, entre otros muchos, es el planteamiento de la necesidad de que la  ley contra la discriminación sometida a su aprobación por el partido comunista, se hiciera desde la perspectiva de las mujeres afrocubanas, por cuanto: “Las mujeres de piel oscura… han de sufrir además de las desventajas que como mujeres les depara el hecho de que no existe la completa equiparación, la preterición que trae acompañada en nuestro país el color de la piel”2.

Pensamiento que no cesa de manifestarse con el nuevo proyecto social iniciado el Primero de enero de 1959. Ahora, desde otra perspectiva y con otro enfoque, determinado por las circunstancias histórico-sociales en que están inmersas sus representantes. Una nueva generación más preparada, con muchas potencialidades continúa la senda que una parte de las generaciones anteriores se trazaron, dando continuidad o “como devenir de la historia del pensamiento negro cubano [en este caso, el femenino] como proceso vivo, que no deja de pensarse, de interrogarse”3.

Su forma de expresión rompe el silencio sobre la capacidad de las mujeres negras y sus aportes  a la sociedad,  rasga la estructura articulada en torno a las relaciones de género, raza, y clase, “lucha por la representación, y el poder para representarse a sí mismas (…) y ante los otros, frente a los estereotipos supremacistas blancos” 4.

Son creadoras cubanas que, desde su percepción y especialidad, rompieron y rompen  muchas identidades impuestas a las mujeres negras, desmontan estereotipos de sumisión y objetivación, denuncian nuevas situaciones creadas, visibilizan lo silenciado en el pasado, marcan la continuidad de ese pensamiento en los procesos históricos y culturales, recordando, en un reto de afirmación y de identificación ¡De donde venimos!, planteando, ¡A donde vamos!, y reafirmando ¡Aquí estamos!

Quiero terminar con un fragmento tomado del libro El arte para mí fue un reto de Elvira Cervera cuando escribió: ¨(…) Me conmuevo profundamente ante esa bellísima muchacha negra de cabellera sofisticada y andar cimbreante que, símbolo de rebeldía, se mueve por nuestras avenidas con un desafiante ¡Yo también!, clavado en la pupila¨5.

Notas: 1 Arabella Oña Gómez: “La inteligencia negra”, en periódico Adelante, no. 34,  marzo de 1938.
2 Informe de la senadora mestiza y militante del Partido Comunista, Esperanza Sánchez Mastrapa, a la Asamblea del Congreso de la Federación de Mujeres celebrado en 1950.Tomado de Alejandro de la Fuente: Una nación para todos. Raza, desigualdad y política en Cuba, 1900-2000. Editorial Colibrí. Madrid, España, 2000, pp. 322-323.
3 Alberto Abreu: “La memoria y el olvido: (una mirada negra a la historia del pensamiento y de identidad nacional cubana). Inédito. Facilitado por el autor.
4 Alberto Abreu. Ob cit.
5 Tomado de Elvira Cervera: El arte para mi fue un reto, Ediciones UNIÓN, La Habana, 2004, p. 135.

Un comentario en “Pensamiento femenino negro cubano

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: