negra cubana tenía que ser

El nombre de Yanet aparece en el listado de amigos de mi querida Iddia pero yo no la conocía. A mi llegó como la doctora quien estaba ingresada en un municipio alejado del centro de Buenos Aires y su estado preocupaba a un grupo de personas, quienes intentaban apoyarla con sus propios recursos.

Sandra Chagas, la guerrera afrouruguaya de quien tengo mucho que aprender, llego a mi muro con su pedido de ayuda. Y llegó rotunda, luego de haber presentado denuncias debido al estado en que se encontraba Yanet. En el proceso la acompañaron otras activistas del Grupo Matamba, organización de afrodescendientes de la Argentina.

Me subí a su carro porque confío en mi tocaya y sus ojos son los míos. Nuestro historial de activismo antirracista nos une. Cuando parecía que el agua tomaba su nivel, Sandra tiene que seguir guerreando pues la han privado del derecho que la asiste, dado las horas de entrega y amor, a visitar a Yanet. Mis disculpas compañera.

Varias razones explican mi interés en Yanet: quien hoy necesita ayuda es una mujer que ha dedicado más de la mitad de su vida a ejercer la medicina. Ella tiene 45 años, si desde los 17 está visitando aulas y hospitales, pues su primogénito no es el chico que salió de su vientre sino su propia carrera. Mis respetos.

Por demás se trata de una emigrada, como yo, como tú, como cualquiera; una mujer sola que intenta llevar una vida adelante, con los conocimientos que un día atesoró y con la voluntad que heredó, quiero suponer, de las mujeres de su familia. Yo soy madre, como ella, y pensar que mi hija esté sola un rincón de esta Tierra, enferma y sin toda la atención que necesita, me hace doler el alma. No la traje al mundo para eso.

A partir de los últimos días de diciembre Yanet se volvió mis días y mis noches. Milady, la cubana que la conoció ya en ese estado, y que ha asumido esta como SU TAREA, llega a ciertas horas a mi chat para hacerme reír con las ocurrencias de nuestra médica o para preocuparme por las valoraciones de los especialistas que le asisten. Y no está de más decir que si Yanet tuvo todos los días una voz que le hablara en cubano y la consintiera esa fue la Milady.

De Milady también tengo mucho que aprender: su amor incondicional, su no-quiero-nada-para-mí. La vida nos ha convertido en hermanas. Ella no sabe quien soy, yo tampoco me atrevería a decir algo sobre su vida para no errar; no obstante, me sobra con lo que esta habanera me ha enseñado en las últimas dos semanas de mi vida: su dedicación infinita.

Milady y Sandra son quienes nos unen a través de un chat a Yanet. Son ellas quienes mejor representan nuestros deseos de que la médica cubana se recupere cuanto antes, para que regrese a la isla con sus familiares. También gestionan los recursos.

Hoy a los 10 días de iniciado el 2017 puedo decir que la campaña que Jovann Delgado creó el 21 de diciembre, ha logrado reunir 5098 dólares. Enviar la plata a la Argentina, a través de la Western Union, ha costado 250 dólares. Sandra ha recibido entonces 57 379 pesos argentinos. Dicho monto fue dividido entre Milady (24639)  y Sandra (32740), y así ir asumiendo los gastos que fueran apareciendo. Hasta el momento se han usado 4200 para pagar a quien por una semana cuidó diariamente por 12 horas a Yanet.

Ahora podría decir que Yanet está en mejores manos, las perfectas para mí; pues además de los especialistas argentinos que ya le asistían, en estos momentos están al pie de su cama un grupo de galenos de la isla. En todos los casos de manera voluntaria y desinteresada.

Dicho equipo médico, ya con el rábano tomado por las hojas, se ha decidido por una asistencia de enfermería más profesional durante 24 horas. La empresa se llama Experiencia Salud y costará  55 pesos la hora y se pagará con la plata que aun nos resta, que es considerable. El servicio consistirá específicamente en dos especialistas en enfermería, a rotar cada doce horas. Con esto se garantiza que se le pueda movilizar, higienizar como es debido, satisfacer sus necesidades en todo momento. Eventualmente podrían aparecer algunos otros gastos referidos a tratamiento, traslado, etc. Ya lo iremos informando.

En estos momentos a Yanet se le está aplicando un tratamiento antibiótico para disminuir la infección y también se ha decidido disminuir casi a cero las visitas, porque su sistema inmunológico así lo amerita, con la intención de que mejore la cicatrización y por tanto sanen las escaras. Para que Yanet pueda viajar a la isla a reencontrarse con sus familiares tiene que recuperarse.

Para las personas que han donado, entre cuales nos encontramos quienes lanzamos esta recolecta, es importante saber que su dinero se está usando y usará para lo que les dijimos: lograr que Yanet tenga un acompañamiento la mayor cantidad de horas posibles y de calidad superior -esto ya es un hecho-, de manera que se pueda estabilizar y viajar pronto a la isla. Gracias gente hermosa.

Mientras termino este texto recibo una llamada. Me cuentan que Yanet está afebril, lúcida, comunicativa, mucho más enérgica. Por demás tiene hambre. Durmió la noche como un ángel y en esta semana se tomarán decisiones importantes con relación a su traslado, la alimentación y el tratamiento des las escaras. Quizás los últimos días de enero nos premien con Yanet ya en el terruño.

Agradeciendo a las diosas y dioses, a los vivos y a los muertos, a todos los seres que nos acompañan.

Negracubana.

Foto: J.