Por Roberto Zurbano
El 10 de octubre es un día feriado en Cuba.
Entre las tantas razones, se insiste que Carlos Manuel de Céspedes le da la libertad a sus 12 negros esclavos e inicia la Guerra redentora. Claro, no se dice que ya estaba arruinado y se había quedado con los esclavos más inútiles y sumisos, pues los demás habian sido vendidos o alquilados a otras fincas; tampoco que la conspiracion había sido descubierta y hubo que adelantar las fechas.
Otros patricios, mucho antes, habían liberado a algunos de sus esclavos; pero la verdadera libertad no nació de la bondad de ningún esclavista, fue la que ellos se ganaron por sus propias manos y cabezas. Desde entonces ha sido asi…
Respeto a toda la solidaridad del mundo, sin embargo algo como la libertad nadie te lo puede regalar, es una conquista de cada día y de toda la vida.
En mi familia hay varios doctores en eso…. mi bisabuelo mambi Antonio Torres; mi padre Nenecito; mis tias Norma, Gallega o Nester; mi Hermana Mercedes; mis vecinas Juana Rosa o Fitila; Mirta, la madrina de mi hermano mayor, Gilbert;, en fin… una lista que viene de los ancestros y no termina.
Para un negro cubano la libertad tiene el mismo costo que la dignidad y ser digno es algo que nos cobran por el color de la piel, el orgullo de ostentarla y por la inteligencia de defenderla, superarla y olvidarla, cuando llegue ese dia.
Amén. Recuerdo que cuando publicaste tu artículo de opinión en The New York Times le comenté a varios amigos que me extrañaba que no hubieses centrado el texto precisamente ahí, en la dicotomía de libertad (igualdad) concedida y libertad (igualdad) conquistada. Ahi está una de las claves de la madeja.
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Es cierto, Jorge Ignacio, pero entonces me apremiaban otras cosas, ahora he tenido tiempo de leer y ahondar en otras visiones y problematicas de lo cubano esencial , para decirlo rapido. Te agradezco esas iluminaciones, pues se que no son criterios radicalizados por la politiqueria o la ignorancia. Ando en el Connecticut College intentando terminar mi libro, bien apartado con suficiente tiempo y espacio para pensar y relajarme despues de tanto ajetreo, mil gracias, amigo, aun guardo tu primera Biblia con tu nombre en letra escolar, que tambien fuera mi primera Biblia, un abrazo
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Hola, comparto su comentario con el autor. Slds
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